El partido empezó con el dominio de Ferro. Armani tapó dos pelotas, el rival se acomodó en la cancha, acercó la línea de cuatro defensores a la de los volantes y no había espacio para jugar ni para maniobrar. Llegó el error grosero del juez de línea Di Paola, que cobró offside de un lateral y el conjunto Verde perdió el orden. Mirá el resumen
De un corner, en el que Merlo metió mucha gente en el área, llegó el injusto gol, tras una carambola. La defensa de Ferro no pudo reaccionar porque los hombres de ataque realizaron una cortina, al estilo básquet, que evitaba la salida de los centrales y el arquero.
En la segunda mitad, Oeste empujó y fue para adelante pero no había ideas. Lértora cortaba todo lo que pasaba por mitad de cancha, los ingresos de Maxi Castano -quien hizo un gran trabajo-, y de Cristian Zermatten, abrieron el juego y el partido. Por eso “Vitrola” Ghiso metió a Santi Fernández, quien será clave para el primer gol. El centro del “nene mimado”, se encontró con César Carignano, que se elevó y, con impecable cabezazo, envió el balón al fondo del arco. El empate todavía era injusto.
Justamente, la mujer que debía impartir justicia, se equivocó, al fin, a favor de Ferro. Cobró infracción sobre Patricio González, cuando dio la sensación de ser al revés, y el tiro libre ejecutado de manera precisa por Zermatten llegó a la cabeza de un “Pato”, que nos hace gritar por vía aérea. Fue el gol más importante (de lo que se jugó hasta ahora) del campeonato.
Cuatro triunfos al hilo para Ferro Carril Oeste, que acelera su marcha pero que tendrá una estación en Mar del Plata para enfrentar a Aldosivi. De a poco se ilusionan todos pero hay que seguir pensando partido a partido. Un consejo para los rivales: abran paso que viene un tren.
Fuente: Ferrocarril Oeste
