Un empleado del Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires (GCBA) se presentó en una sede de la Policía Federal Argentina (PFA) del barrio porteño de Constitución asegurando que era fiscal federal, pero todo resultó ser una farsa. Ricardo Siniscalchi (56) llegó este lunes 14 de marzo a la División Ferrocarriles del Tren Roca de la PFA, que funciona en la calle Salta al 1900. Exhibió una credencial que lo acreditaba como funcionario judicial y enseguida comenzó a dar directivas al personal. No está claro cual era su objetivo.
Entre otras cosas, Siniscalchi explicó que había sido designado en la Unidad de Delitos Complejos y solicitó una reunión con el jefe de la división porque en las próximas horas iniciaría su turno. Mientras esperaba ser atendido por el titular, comenzó a impartir algunas directivas a los agentes presentes, a quienes además amenazó con iniciarles un sumario si no cumplían con sus órdenes.
La actitud del supuesto fiscal llamó la atención de los efectivos. Para despejar las dudas verificaron su identidad y el cargo que presuntamente ocupaba y descubrieron que no había registros de un funcionario judicial con ese apellido.
A raíz de ello, convocaron al fiscal Federico Almeyda, a cargo de la Unidad de Flagrancia Este del Ministerio Público Fiscal de la ciudad de Buenos Aires, quien corroboró que las credenciales que había presentado eran falsas y ordenó su inmediata detención por los delitos de «usurpación de títulos y falsificación de documento público».
Siniscalchi vive en la localidad bonaerense de Banfield, en el partido de Lomas de Zamora. Su domicilio de la calle Carlos Croce al 1200 fue allanado este miércoles por efectivos de la División Unidad de Prevención en Medios de Transporte de la PFA con un resultado sorprendente: hallaron diecinueve armas largas -entre fusiles, rifles y escopetas-, dos pistolas ametralladoras y al menos siete revólveres.
Los investigadores del caso sospechan que se trataría de un coleccionista de armas. En el operativo secuestraron 44 tarjetas expedidas por el Agencia Nacional de Materiales Controlados (ANMAC), entre ellas de tenencia, legítimo usuario y consumo de municiones. Según las fuentes consultadas, «se está investigando el origen y procedencia del armamento», como así también «la validez de la documentación» secuestrada en el operativo.
En su casa el acusado tenía tres cuadros con tres supuestos títulos universitarios: dos de la Facultad de Derecho y uno de Ciencias Sociales, ambos de la Universidad de Buenos Aires (UBA).
Siniscalchi poseía también dos carnets a su nombre del Colegio Público de Abogados de la Capital Federal. En el registro de letrados figura que «no está habilitado», aunque no se detalla por qué.
Según fuentes del Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, el falso fiscal es empleado administrativo de la Dirección General de Educación de Gestión Estatal y planta permanente de la carrera administrativa.
De acuerdo a su registro laboral, en los últimos años trabajó en distintas áreas del Estado, entre ellas facturación y cobranza de los efectores públicos, Lotería y el Banco Ciudad.
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